Y a partir de ahí comenzamos una etapa de construcción de nuestra propia organización sindical. Que desde el inicio contó con el apoyo, la contención y la solidaridad de todo el Sindicato Luz y Fuerza Mar del Plata. Y decimos de TODO el Sindicato, porque recibíamos no sólo el respaldo gremial y el paraguas de la personería, sino que, delegaciones como Dolores, Balcarce, o Gonzáles Chávez, expresaban su solidaridad enviando cupones de la obra social para que no quedasen desprotegidas nuestras familias.
En la historia de nuestra nueva organización va a quedar grabado el orgullo de haber pertenecido a un sindicato con conciencia, mucha dignidad y mucha solidaridad. Siempre vamos a reivindicar el haber sido parte de un sindicato que abrió una profunda huella en el movimiento obrero, construyendo una verdadera organización alternativa, como es la FETERA, de la que participamos desde su mismo origen.
Otro camino, plagado de entregas y traiciones a los trabajadores, transitaron quienes niegan las luchas de clases, como la FATLyF y la cúpula de la CGT y quienes fueron cómplices necesarios para aplicar ajustes permanentes sobre los bolsillos y los derechos de los trabajadores.
A Luz y Fuerza La Pampa, después de la legitimidad otorgada por los trabajadores y la sociedad pampeana, el Ministerio de Trabajo le otorgó legalidad para actuar en el territorio provincial a través de la inscripción gremial, y ya ha incorporado afiliados en catorce localidades del interior. Cuenta con cobertura de la obra social del sindicato hermano de SUTNA (de neumáticos) y administra los fondos y tiene convenios con los prestadores de salud de la provincia a través de la Mutual “Agustín Tosco” La Pampa.
También tenemos un club social de una hectárea, con salón de fiestas, piletas, cancha de fútbol, voley, y parrillas, y este año adquirimos nuestra sede propia, ubicada en el radio céntrico de Santa Rosa.
La larga y oscura noche que comenzó con la dictadura para instalar un modelo de exclusión y pérdida de derechos fundamentales de la clase obrera, encontró su freno y principal oposición en quienes se negaron a ser domesticados primero y cómplices después. Entre los que está el Sindicato Luz y Fuera Mar del Plata, y entre quienes queremos estar nosotros.