Buenos Aires. El Gobierno salió a patear el tablero en las negociaciones que mantiene con las empresas privatizadas. Con el fin de destrabar los acuerdos que se encuentran frenados con las gasíferas y eléctricas, la administración kirchnerista decidió convocar a audiencias públicas para analizar las propuestas oficiales de readecuación contractual que hasta ahora no han sido aceptadas por las compañías. Con esta fuerte jugada, el Gobierno busca ponerles presión a las privatizadas que no aún no firmaron los acuerdos de renegociación. Son 13 empresas del área energética que ahora deberán pasar por audiencias públicas. Por el lado del sector eléctrico se encuentran las distribuidoras Edenor y Edesur y las transportistas Transnoa, Transnea, Transpa y Transcomahue. El lote se completa con el Ente Provincial de Energía de Neuquén.