Mar del Plata no quedaba al margen. Una ciudad plagada de contradicciones. Que ostentó en los 90 y comienzos del 2.000 el siniestro primer puesto en el ranking de la desocupación y que hoy vuelve a vender la postal de ciudad feliz, como si nada hubiera pasado. Escondiendo debajo de la alfombra la postergación y marginación de miles de vecinos, barrios que siguen manteniendo los niveles históricos de desocupación de la década pasada y cifras que indican que el único trabajo que creció es el precarizado o en negro.
Un claro ejemplo es la lucha que siguen manteniendo los compañeros del pescado, explotados por las cooperativas que bastardean esa definición. Los compañeros del pescado son una señal. Por algo las más de 25 organizaciones sindicales, políticas y sociales que decidieron convocar al acto por el 1 de Mayo, eligieron el Puerto como punto de encuentro.
Cerca de 500 personas escucharon las palabras de un compañero del pescado que resumió la situación que viven miles de trabajadores en el sector y la lucha que nunca claudica y se renueva, cada vez más convencida y dispuesta a multiplicarse. Para cerrar con un documento de consenso que fue leído por nuestro compañero Secretario Adjunto, Daniel Cuenca.
Entre las organizaciones que se acercaron al acto estaban compañeros de la CTA Mar del Plata, de nuestro gremio, de la Asociación Bancaria, de ATE, de APU, SUTEBA, la CCC, el Polo Obrero, la Corriente Intransigente Social, el Movimiento Teresa Rodríguez, la Multisectorial de la Mujer, el Foro Argentino de la Deuda Externa, la Asamblea Antiimperialista Marplatense, la Unión Obrera del Pescado, CEPA, la Agrupación «Ya Basta”, el Partido Comunista, el Partido Intransigente, el Partido Comunista Revolucionario, el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, el MST y el Partido Obrero.
Los tiempos están cambiando, no hay dudas y el motor vuelve a ser el trabajador.
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{{{Documento marplatense por el 1 de Mayo}}}
Este 1 de Mayo nos encuentra a los trabajadores luchando en todo el país por nuestras reivindicaciones, en particular la lucha salarial, por mejoras en las condiciones de trabajo, por la recuperación del patrimonio nacional para el pueblo argentino, en defensa de la Salud y la educación pública. Nuestro salario, producto de los permanentes ajustes y la devaluación, ha quedado en los niveles más bajos de la historia. Por eso hemos dicho basta a esta injusticia y la lucha por la recomposición salarial para cubrir el costo de la canasta familiar es una de las banderas de lucha del movimiento obrero, tanto en ocupados como, asimismo, en los compañeros desocupados que luchan por los 350 pesos para los planes sociales y los jubilados y pensionados por el 82 por ciento móvil. Es mentira que si hay aumentos de salarios se desata la inflación y que por lo tanto hay que poner un “techo” a la cuestión salarial. La inflación responde a otros factores como la especulación, la insaciable voracidad de los monopolios, el negocio de la exportación y otros factores.
Apoyamos a todos los gremios en la lucha y exigimos un salario para todos los trabajadores acorde a la canasta familiar. Trescientos cincuenta pesos para los planes sociales y aumento de jubilaciones y pensiones.
Mar del Plata no es ajena a estos conflictos, como vemos en la lucha que llevan adelante los trabajadores energéticos, los estatales y docentes, los desocupados, los del sector privado.
En relación a la desocupación, aún en niveles altos e intolerables, exigimos trabajo para todos a través de la reducción de la jornada laboral y la universalización de los planes sociales.
La explotación ha aumentado al persistir el trabajo “en negro” que abarca a la mitad de los trabajadores ocupados y en nuestra ciudad, en un porcentaje mayor, por el trabajo no registrado que aplican los monopolios pesqueros a través de las pseudo cooperativas. Estas luchas van creciendo en todo el país, han conseguido arrancar triunfos importantes como el de los subterráneos en la Capital Federal, la de los docentes en varias provincias, telefónicos, ferroviarios y recientemente la lucha del Garrahan y los hospitales públicos. En algunos de estos conflictos el poder político apeló a la represión abierta para frenarlos como el caso de los docentes salteños y los aeronáuticos de Buenos Aires, repitiendo viejas fórmulas de las clases dirigentes que han fracasado y fracasarán nuevamente.
Denunciamos estos atropellos y exigimos que se termine con la represión, la judicialización de la protesta social; y la libertad de los presos políticos por luchar por Pan y Trabajo. Como también exigimos que se castigue a los responsables materiales y políticos de los asesinatos de Kosteki y Santillán en Puente Pueyrredón y todos los asesinatos en la lucha popular.
Nuestra patria sigue siendo saqueada por los imperialismos, a través del pago de la ilegítima y fraudulenta deuda externa, los acuerdos con los organismos internacionales, el llamado canje de bonos y la insaciable tasa de ganancia de los grupos económicos. Como trabajadores y patriotas exigimos al Gobierno Nacional y al Congreso que se investigue la deuda externa y no se siga pagando a expensas del hambre del pueblo.
Hay que volcar los recursos para pagar la deuda interna con los trabajadores. Para reabrir fábricas, apoyar a las recuperadas, subir los salarios, dar solución a los desocupados y jubilados. Ésta es la deuda que hay que honrar y no la deuda trucha con los imperialismos.
En pocos meses más se anuncia la presencia en nuestro país y en nuestra ciudad del principal responsable de las agresiones imperialistas y el saqueo a escala mundial, que es George W. Bush. Repudiamos a este asesino y genocida. Expresando nuestra solidaridad con los trabajadores y el pueblo iraquí que enfrenta valientemente la agresión y la ocupación de la nación. Damos nuestra solidaridad a los trabajadores y los pueblos latinoamericanos que luchan contra el imperialismo, como Ecuador, Bolivia, Venezuela, Cuba, Brasil, Uruguay, etc. Repudiamos el envío de las tropas argentinas a Haití.
Queremos finalizar recordando a todos los trabajadores que dieron su vida por sus hermanos de clase. A los 30 mil desaparecidos, a los que cayeron en las luchas populares, a los caídos en el Argentinazo. Por ellos y por nuestro futuro y el de nuestros hijos no podemos ni debemos aflojar en la lucha por nuestras justas reivindicaciones, en la lucha por la Unidad de los trabajadores, ocupados, desocupados y jubilados y en la unidad con el conjunto del pueblo, en la coordinación de nuestras luchas que de ser necesario y de no obtener respuestas del Gobierno y las patronales lleguemos a concretar un Paro Nacional.
Por eso en este 1 de mayo decimos:
{{¡Viva la lucha de los trabajadores!
_ Por el aumento salarial.
_ Trabajo para todos.
_ Por la unidad de los trabajadores.
_ Por una Argentina libre de toda opresión.
_ No al pago de la deuda.
_ ¡Viva el 1 de Mayo!
_ ¡Gloria a los mártires del Movimiento Obrero!}}