«Nos dieron esas acciones al no indemnizarnos al pasarnos a una empresa privada -señaló Osvaldo Ramini, director de Edenor en representación del PPP-. Pero los resultados de la compañía no alcanzaron a repagar los $0,92 por acción».
Hoy el PPP está integrado por 2.037 empleados. Al vender Electricité de France (EDF) su parte de Edenor al local Dolphin, el PPP reclamó que la oferta le fuera extensiva. Pero las cuentas no les terminan de cerrar.
«No hay cifras exactas de cuánto pagó Dolphin por el 65% de Edenor, pero los trascendidos hablan de 100 millones de dólares. Si proyectamos ese precio sobre nuestro 10%, el PPP estaría valuado en unos US$ 15 millones». estimó Ramini.
El punto es que esos 15 millones de dólares prácticamente son el equivalente de la deuda que el PPP tiene con el Estado, con lo que de cerrar la operación, no les quedaría nada en las manos. «Por eso impulsamos una estrategia a dos puntas -señalan los empleados-.
Por un lado, gestiones ante el Poder Ejecutivo, para que nos haga una quita tal como se la exigió a los acreedores de la deuda externa. Por otro lado, logramos que un grupo de diputados presente un proyecto de ley para que esa deuda se cancele».
Las acciones del PPP son clase C, que no son transferibles en partes, sólo como grupo sindicado. Los empleados piden su conversión en clase B. Y que entonces pudieran cotizar en la Bolsa, como suponen hará el Grupo Dolphin con parte de los papeles que le compró a EDF.
Sería otra opción para venderlas. Pero los plazos los están corriendo. Por normas bursátiles, cuando Dolphin ejerza la compra a EDF tendrá 10 días para hacer una oferta igual al PPP.
Los empleados lograron que las autoridades bursátiles (CNV) proroguen ese plazo 90 días adicionales.
Pero si en ese lapso no consiguen la quita de la deuda, el dinero de Mindlin sólo alcanzará para pagar al Estado. – ¿Qué harían entonces? – Presentaríamos un amparo a la justicia, demandaríamos al Estado para hacer valer nuestros derechos. Porque, al igual que el país, fuimos víctimas de una crisis que nosotros no creamos.