El rango de variación tarifaria, punta a punta, llegaba hasta 100% a fines del 2004″, señaló el informe.
En sentido inverso, para empresas radicadas en las localidades con la energía más cara, se les abre la opción de obtener energía menos costosa si cambia de provincia.
«Una empresa industrial podría disminuir hasta 50% el costo de la electricidad o del gas natural en función de la localización elegida», indicó el estudio.
El rango de precios permite establecer los siguientes ejemplos: La tarifa de energía eléctrica para un pequeño consumidor industrial promediaba los 14 centavos por kilowatt a fines del 2004, a nivel nacional. Pero en San Juan se pagaba 11 centavos por kilowatt, mientras que en La Pampa la tarifa ascendía, a la misma fecha, a 21 centavos.
A la vez, la tarifa de La Pampa resultaba 75% superior a la de su vecina Río Negro. En el caso del gas natural, un pequeño consumidor industrial, de menos de 9.000 metros cúbicos de gas mensuales, pagaba en promedio 13 centavos por metro a fines del 2004.
En las provincias patagónicas, el costo disminuía a menos de 10 centavos el metro cúbico, mientras que en la Capital y el conurbano superaba los 16 centavos por metro cúbico.
Si se _evalúa la situación tarifaria para las distintas regiones del país, el gas natural es en términos relativos más barato en las provincias del norte y del sur del país, se encarece en la región central y alcanza sus valores máximos en la Capital y el conurbano.
Si bien la disparidad tarifaria por regiones sigue siendo muy pronunciada, se ha reducido en los últimos tres años. La razón principal es que en varios distritos la tarifa subió a partir de la reactivación industrial de 2003-2004 y de esa manera los precios se nivelaron hacia arriba.
«Tener tarifas de energía cara resulta obviamente más costoso en términos económicos cuanto más depende la estructura industrial de la jurisdicción de actividades energía intensivas», advirtió la Mediterránea.