Según informó Indymedia Argentina, en un informe hecho desde Mar del Plata, dicha operación consiste en realizar una serie de detonaciones submarinas con cañones de aire comprimido, que generan ondas de resonancia que permiten descifrar la composición de la roca bajo el mar. Las exploraciones son muy ruidosas y deben ser lo bastante fuertes como para penetrar en la roca y regresar a la embarcación que realiza la exploración.
Para nuestro secretario general, José Rigane, el impacto por las acciones de las petroleras sobre la costa de Mar del Plata puede ser muy importante.
“Hay que simplemente levantar la mirada y revisar qué pasa en Neuquén, en San Juan, en La Rioja, qué pasa en Salta o en Catamarca”, señaló Rigane, “cuáles son las denuncias de los pueblos originarios, de los pobladores locales, respecto del tema contaminación”.
Para el titular de la FeTERA “hoy las empresas utilizan todos los mecanismos que no deben utilizarse, para poder avanzar en el desarrollo de la producción en el menor tiempo posible, y por eso usan productos químicos que están absolutamente prohibidos, con las consecuencias que origina. Simplemente porque su objetivo es la máxima rentabilidad”.
{{{Alto riesgo.}}}
Los propios ejecutivos de Repsol-YPF han declarado que ésta es una operación de “alto riesgo”. Cierto es que Repsol no habla de un riesgo económico para las petroleras. Otras experiencias exploratorias en otras partes del mundo nos permiten fundamentar un proceso que se repite: el de desinversión, por las ganancias, que superarán ampliamente el dinero invertido.
Hay que detenerse, como lo señala Rigane, en el riesgo que implica para la población y para el medio ambiente, la extracción de hidrocarburos, de la manera en que lo realizan estas empresas.
Según el informe de Indymedia Argentina, una de las mayores causas de contaminación oceánica son los derrames de petróleo. “El 13% de los derrames que se producen, se deben a accidentes que sufren los grandes barcos contenedores de petróleo que, por negligencia de las autoridades y desinterés de las empresas petroleras, transportan el combustible en condiciones inadecuadas. Los derrames ocasionan gran mortalidad de peces, aves acuáticas y otros seres vivos del océano. Esto altera el equilibrio del ecosistema y modifica la cadena trófica. En las zonas afectadas se vuelven imposibles la pesca, la navegación y el aprovechamiento de las playas con fines recreativos.”
{{{Denunciada.}}}
Repsol-YPF se encuentra actualmente con una denuncia penal por la contaminación de su Planta de Almacenamiento de Combustible, que se encuentra en el Puerto de Mar del Plata. Una realidad que el municipio de la ciudad bonaerense se encarga de ocultar.
Como pasó desapercibida la noticia que señalaba que uno de los barcos de la empresa multinacional tuvo un accidente en Tarragona, Cataluña, que provocó una mancha de fuel de 70 metros en la Costa Dorada. La falta de mantenimiento y de personal en condiciones, son las fotografías reiteradas de una empresa que funciona y se la deja funcionar en una zona liberada.
{{{Nada en la billetera del Sr. Katz.}}}
Indudablemente, ni Mar del Plata ni ninguno de los partidos de la costa bonaerense se verá beneficiado económicamente por las tareas de exploración y explotación de las petroleras.
Para José Rigane “el hecho de que hay petróleo en esta zona, por ejemplo San Caye-tano, Mar del Plata, Madariaga, no es un descubrimiento de ahora, actual. Hace más de 30 años que se habla de la existencia de petróleo en esta zona. Ya están marcados los lugares, los pozos, y existieron misiones diplomáticas incluso, encabezadas por delegaciones de Estados Unidos, verificando esas comprobaciones. Las privatizadas, con la entrega de nuestro patrimonio, se apropiaron de toda la información que estaba en poder de YPF. ¿Por qué no se exploró antes? Porque no estaba el desarrollo tecnológico que hoy lo permite, ni el precio del barril de petróleo, que ha subido y beneficia a estas empresas, propiciándoles la posibilidad de la exploración y explotación de zonas que antes no eran prioridad”.