{{{Paritarias forzadas.}}}
En este marco se cortó toda conversación con la empresa. La discusión por la recomposición salarial debía darse a partir de cuando la empresa obtuviese un incremento de tarifas, y ese incremento lo obtuvo desde el 1 de enero de este año. Las tarifas aumentaron, pero el sueldo no fue actualizado, la empresa ni siquiera abrió ese debate.
Y en este punto es importante comparar que, mientras en las cooperativas los sueldos implican entre el 40 y el 50 por ciento de lo facturado, en EDEA ese porcentaje no llega al 10 por ciento. Y a esto hay que agregar que históricamente el sueldo de los compañeros siempre fue un ingreso digno, pero con el paso del tiempo, y no porque otros gremios ganen mucho más, los sueldos han ido perdiendo su nivel, mientras los de-más lo han mantenido o lo están recuperando. No porque los demás sean exagerados; es apenas lo que corresponde, y es que los nuestros han ido cayendo en cuanto al poder adquisitivo.
En el contexto actual, abrir la discusión planteándole a la empresa -incluso desde la justicia y la pertinencia que nos amparan- la necesidad de actualizar los salarios, no es posible, a no ser que se den por cerradas todas las cuestiones anteriores que están sin resolverse o que se han resuelto en forma arbitraria unilateralmente por la empresa. Y está claro que desde el Sindicato de Luz y Fuerza de Mar del Plata no queremos discutir en las condiciones que impone la empresa. Por lo tanto, pedimos una audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Nación para abordar el tema salarial, para, en el marco de esa intervención, exigir que se discuta sobre paritarias.
El miércoles 30 de mayo hubo una audiencia en la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación, a la que asistió el gerente de la empresa, Eduardo Mantuano, con uno de los abogados de la empresa, Alejandro Sporleder. Luz y Fuerza Mar del Plata estuvo representado por Marcelo Bustos Fierro, abogado de CTA, que se encargó de realizar las presentaciones del gremio y los compañeros de la Secretaría Gremial. En esta instancia, la empresa se limitó a “tomar vista” y nada más, se dedicaron a darse por enterados de estos temas, que evidentemente ya conocemos todos.
Lo que definió el Ministerio ante eso es una nueva audiencia para el 20 de junio, en la que, tanto la empresa como el gremio, coincidimos en que debe estar el sindicato de Mercedes, y también la FATLyF, aunque sea una organización de segundo grado, por ser representantes de trabajadores dentro del ámbito de EDEA S.A., a fin de agilizar la discusión, y al mismo tiempo para que todos podamos avanzar sin que la empresa se excuse ante la ausencia de algún sector.
{{{Convenios a conveniencia.}}}
Hace algunos años realizamos, en conjunto con el Ministerio de Trabajo, una inspección en EDEA S.A. para constatar la cantidad de empresas contratistas, qué tareas realizan y bajo qué convenio colectivo encuadra a sus trabajadores. En esa oportunidad se detectaron más de 300 constataciones de infracción a la ley de Marco Regulato-rio. Y para profundizar sobre este tema hay que tener muy presente que esta Ley 11.769, (Art. 53 inc O) dice que todos los trabajadores de la empresa deben encuadrarse en el CCT por el cual se le otorga la concesión.
Pese a esto, y como ya lo hemos dicho tantas veces, de la Constitución para abajo, esta empresa desconoce todo, no reconoce ninguna legislación vigente, se maneja como un Estado dentro de otro Estado. Y la demostración está en que hace unos 20 ó 30 días se repitió la inspección del Ministerio en Mar del Plata y en el Partido de La Costa, en la que se comprobó que EDEA tiene más de 200 trabajadores encuadrados en otros convenios colectivos que no corresponden al área eléctrica. El caso más significativo es el de la UOCRA que, además del Convenio Colectivo 76/75, tienen distintos convenios posteriores, que celebra a conveniencia, por partes y por empresas, que van permanentemente a la baja de los intereses y los derechos de los trabajadores. Quedó certificado nuevamente esto, y de ahí surgen una serie de presentaciones que haremos desde el gremio, ante el OCEBA y el propio Ministerio de Trabajo y también de Infraestructura de la provincia, para que esa información se emplee para sancionar a la empresa por semejante irregularidad, de manera más contundente que hasta ahora. Y, para conocimiento de todos, si se aplicaran correctamente, las multas deben ser progresivas, y según el contrato de concesión, hasta pueden llegar a la caducidad del contrato.
{{{¡Después te piden que te pongas la camiseta!}}}
En enero de 2006 se firmó un acta en el que la empresa se comprometió a proveer de indumentaria a los compañeros que no la reciben, en un plazo menor a dos meses. Eso nunca pasó. La empresa no la entregó ni se hizo cargo de los gastos correspondientes. A partir de que este incumplimiento se extendió por más de un año, nuestra organización pidió intervención al Ministerio de Trabajo para que verificaran si la empresa cumple el artículo convencional referido a la ropa de trabajo.
Se hizo una inspección, se certificó que la empresa no cumple con esta obligación, y está pendiente una resolución por parte del organismo del gobierno.
{{{Palos en la Bolsa.}}}
Nuevos casos de discriminación en la selección del personal nos llevan a retomar el tema de la Bolsa de Trabajo. La empresa debe recurrir a la Bolsa de Trabajo del gremio que tiene jurisdicción en el lugar en que se necesita realizar una incorporación. Debe describir las características del puesto para el que se abrió la vacante, y solicitar los postulantes (a no ser que el tipo de puesto no pueda ser cubierto por ningún compañero de la Bolsa por falta de condiciones). Y entre quienes sean convocados, realizar una serie de exámenes. Toda lógica indica que la empresa tiene que circunscribir ese examen a determinar si el postulante está preparado para las condiciones que requiere ese determinado puesto. Sin embargo, desde siempre, EDEA S.A. se ha empecinado en llevar las entrevistas con los posibles ingresantes a cuestiones personales. Se los entrevista sobre su vida privada, su familia, relaciones interpersona-les, su tiempo libre. En ningún momento se les pregunta o se los evalúa para determinar si están preparados para determinado puesto. Esto pasó recientemente en el caso de dos postulantes que, luego de la entrevista con la empresa, nos contaron lo sucedido. EDEA los rechazó arbitrariamente y le pidió al gremio otros dos candidatos. Ante lo cual nosotros decidimos no enviar a la empresa ningún otro postulante, sólo porque el criterio de evaluación sea tan inexplicable que tal vez haga que rechacen indefinidamente a todos o a cualquiera, por la razón que quieran dar. Les contestamos que, de seguir utilizando esa metodología, no les volveríamos a enviar a nadie más. Nuestra postura fue tan firme que logramos que la empresa incorporara a esos compañeros durante un período de tres meses de prueba. Y acordamos que, finalizado ese plazo, el gerente de recursos humanos, Ing. Eduardo Mantuano, y nuestro Secretario General, se sentarían, con elementos concretos, a definir su incorporación o el rechazo. Pasaron los tres meses y se produjo la baja de las postulaciones, sin que la empresa siquiera nos lo comunicara.
MANTUANO FALTÓ A SU PALABRA, DEJANDO A LOS COMPAÑEROS EN LA CALLE.
A este caso hay que sumar uno más reciente, en el que la empresa pidió cuatro postulantes -dos oficiales y dos ayudantes- para armar dos equipos de trabajo en un nuevo sistema de guardias. Se les tomaron los exámenes correspondientes a los compañeros propuestos, y de ahí la empresa rechazó a uno de ellos, que es un trabajador reingresante, con toda la experiencia de haber trabajado en la empresa.
Lo significativo es que los veedores que participaron de la prueba dijeron que el compañero no había incurrido en errores que lo descalificaran para el puesto. El compañero pidió entrevistarse con Flavio Gasparini, para acceder a su prueba y que le explicaran qué tipo de errores había cometido. Gasparini no lo atendió, ni siquiera lo recibió, después de que él mismo lo hubiera recibido antes del examen. El gremio también presentó una nota para que se detallara qué errores habían cometido los trabajadores probados. La primera respuesta de la nota fue simple: el compañero no había cubierto las condiciones necesarias para el puesto. Reiteramos la nota, pidiendo mayor especificidad, y comentando que teníamos datos de los veedores sobre el resultado de las pruebas, ante lo cual la empresa volvió a responder en los mismos términos, agregando que enviáramos otros postulantes, o debería convocarlos en forma pública.
Luego de estas irregularidades pedimos intervención al Ministerio de Trabajo, que decidió citar a la empresa a una audiencia por este tema.
En la audiencia, la empresa se negó en forma rotunda a mostrar el examen al compañero, manifestando que la empresa no debe dar explicaciones o, mejor dicho, no mostrar explicaciones.
En la audiencia se le manifestó que esta situación se parece más a un acto discriminatorio que a una evaluación objetiva, a lo que la empresa se manifestó ofendida por lo dicho.
PARECE QUE EDEA ES MUY SENSIBLE A LA HORA DE RECIBIR ACUSACIONES, PERO LOS TRABAJADORES NO PODEMOS OFENDERNOS NI SIQUIERA MOLESTARNOS CUANDO SE NOS DESCUENTA UNA HORA POR NEGARNOS A PARTICIPAR EN UN BRINDIS, NO SE NOS DEFINE LA ENTREGA DE LA PPAP, SE SANCIONA A LOS DELEGADOS Y SE SELECCIONA A LOS INGRESANTES DE ACUERDO A MÉTODOS ARBITRARIOS Y SUBJETIVOS. ÉSTAS SON SÓLO ALGUNAS DE LAS CUESTIONES QUE DEBERÍAN OFENDERNOS COMO TRABAJADORES. PERO LA ÚNICA OFENSA ES PARA LA EMPRESA.
EL MEJOR SINDICATO Y/O LOS MEJORES TRABAJADORES, PARA EL GRUPO CAMUZZI, …… SOMOS LOS QUE NO EXISTIMOS.
{{{Cartón “incompleto”.}}}
Si alguna gota faltaba para rebalsar este vaso, para decir “cartón lleno”, era que la empresa rechazara a un trabajador por “incompleto”. Ésa fue la descripción dada por un alto representante de la empresa, acerca de un compañero que perdió parcialmente una falange en una de sus manos, y que, por orden en la Bolsa de Trabajo e incumben-cias vinculadas a su experiencia y habilidades, fue citado a una prueba para tomar un puesto en EDEA. Luego del rechazo en estos términos, surgió al poco tiempo una vacante similar en Centrales de la Costa, donde el compañero fue evaluado y tomado. ¡Y hoy sigue trabajando allí…!
{{{10 años de EDEA S. A.
_ Peor que un ave de rapiña.}}}
¿Hace falta mayor explicación para la portada de nuestra presente edición? La imagen es clara y contundente. EDEA S.A., como un ave de rapiña, roba, destruye, mata. Usa sus garras y su pico como armas. Su propio beneficio es su único interés. Y cada vez quiere más. Por eso estos diez años nefastos nos tienen denunciando una historia que adelantamos, que deploramos, que queremos revertir.
Dicho esto, es necesario aclarar que el buitre es un animal que no mata por placer ni produce daños buscando el beneficio personal y egoísta, lo que hace lo hace en el marco de una naturaleza que es más sabia que algunos seres humanos que se prestan a los designios de capitales extranjeros, en perjuicio de sus congéneres.
“La empresa EDEA, perteneciente al Grupo Camuzzi, que ya estaban con el tema del gas, cumple diez años, diez años que nos han marcado como toda una experiencia que hemos vivido no sólo los trabajadores, también los usuarios, a partir de que se modificó sustancialmen-te toda la política que se tenía en los servicios públicos en particular, en este caso en la distribución de la energía eléctrica y que se había conocido en esta ciudad a través de la empresa Agua y Energía. Previamente fue la Cooperativa de Mar del Plata, luego Agua y Energía, después fue DEBA, después ESEBA S.A. y finalmente EDEA S.A.
De todas esas secuencias no hay duda de que esta última (de toda la historia de la privatización) debe haber sido la peor en todo sentido. Porque además abarca un lapso importante de lo que fueron -o de lo que son- las políticas liberales y neoliberales, y de lo que significó a la hora de la privati-zación, todas las consecuencias. Para los trabajadores, fundamentalmente ha sido el despido; para los usuarios, el aumento del valor de las tarifas, tabuladas todas en dólares y actualizadas de acuerdo al desarrollo de los indicadores de EE.UU. e Inglaterra. Y eso se ha conjugado en una situación de conocida confrontación con esta empresa hasta el día de la fecha.
La empresa, que ha demostrado toda una política de avasallamiento, de discriminación, de no respeto de derechos, tanto de los usuarios como de trabajadores; y al mismo tiempo ha usado ese garrote fuerte que no termina ahí, ha desarrollado una iniciativa de carácter social, tratando de ganarse la simpatía de algunos sectores de la población haciendo un libro en algún barrio, alguna obrita de teatro… Pero no hay ninguna política seria, de no contaminación por ejemplo.”
El aporte, a modo de muy apretada síntesis es de José Rigane. Quien también deja una mirada expectante, llena de pistas para encarar con coraje esta historia y luchar para revertirla.
“La historia es una sola, es la historia del pueblo argentino. Hay que enfrentar este proceso y hay que dar vuelta la taba, y para eso se necesita crear poder propio, crear y desarrollar organización propia. Se necesita indefectiblemente ganar los espacios de participación. Estas son cosas que no se resuelven en el ámbito de la discusión, que hay que darlas, como paso previo al desarrollo organizativo. Me refiero a un proceso en el que logremos la movilización de la gente para ir en búsqueda de los objetivos que todos anhelamos y pretendemos. Parar esta política que crece y permite crecer al país pero que deja en las manos de un minúsculo grupito, que son los que concentran y centralizan riqueza, mientras la mayoría sigue perdiendo. Entre esa misma mala distribución de la riqueza, desocupación, indigencia, porcentuales muy elevados de pobreza. La única forma en que podemos revertir todo esto es si somos nosotros capaces de generar una alternativa superadora, que sea contemplativa integralmen-te de todo esto, y que apunte a generar mejores condiciones de vida para el conjunto del pueblo argentino. Esto no lo va a resolver otro que no seamos nosotros, los trabajadores, las organizaciones sociales y territoriales; los sectores populares”.
La Comisión Directiva ‘al óleo’.
Está claro que el interés subyacente y supremo de la empresa es hacer desaparecer a la organización gremial. Por lo menos a ésta, que realmente defiende a los trabajadores. Pero las manifestaciones en este sentido son cada vez más evidentes. En una pausa de la reunión referida en el cuerpo central de esta nota en el Ministerio de Trabajo de Capital Federal, el representante legal de EDEA S.A. preguntó a los trabajadores, muy suelto de cuerpo, cómo estaban las cosas entre ambas partes, y obtuvo una respuesta tan cerrada como cierta: mal. Y por poner un ejemplo, se describió la negación de la empresa a dejar entrar a los lugares de trabajo a un compañero de Comisión Directiva. “Pero la empresa ya tiene bastante representación en los lugares de trabajo, para eso están los delegados”, respondió sin más Sporleder. “Además, Fontanari no entra porque habla mal de la empresa, pero Zárate sí entra porque es empleado y está entrando a su lugar de trabajo”. En el plano simbólico, esto deja ver que la empresa quiere ‘dejar pintado al óleo al gremio’, y en todo caso, limitar nuestro accionar a la tarea de los delegados. Al mismo tiempo, desde lo concreto, este impedimento constituye una clara violación de los derechos que le corresponden a nuestro gremio, con legítima jurisdicción y representatividad para moverse por entre los puestos de trabajo con los compañeros.
LOS TRABAJADORES NO PODEMOS NI DEBEMOS PERMITIR, MÁS ALLÁ DEL DERECHO QUE POR LEY NOS ASISTE, QUE SE DESCONOZCA A LOS REPRESENTANTES POR NOSOTROS ELEGIDOS.
HOY SE DESCONOCE A NUESTROS REPRESENTANTES, MAÑANA SE DESCONOCERÁ A LOS PROPIOS TRABAJADORES COMO INDIVIDUOS CON DERECHOS, SOLAMENTE SE LES EXIGIRÁ OBLIGACIONES.
LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES NO SE NEGOCIAN NI SE MENDIGAN, SE EJERCEN.