Este año se cumplen 100 años del descubrimiento de petróleo en Argentina y la venta de los yacimientos es una realidad que no todos queremos aceptar que suceda. Es el caso de Diego Mansilla, quien en este nuevo libro explica la pérdida del manejo estratégico del petróleo y el gas, luego del proceso de desregulación y privatización del recurso comenzado en 1989.
Al momento de presentar el libro de Diego Mansilla, en su carácter de Secretario General de la FeTERA, Rigane expresó su entusiasmo por tratarse de un investigador joven y advirtió la importancia del estudio de recursos estratégicos que han devenido “mercancía”. “Los hidrocarburos son tan valiosos en el mundo, que generan guerras, política de desestabilización del gobierno y espionajes”, afirmó Rigane.
“Éste es un libro conformado con mucha profundidad, es didáctico y da una clara explicación de los conceptos y, en primer lugar, de la historia de nuestro petróleo, de YPF, Gas del Estado, basada en el compromiso del Estado con el pueblo, lo que posibilitó políticas de desarrollo regional y nacional; una historia que explica la grandeza de los argentinos, nuestra Nación, nuestro pueblo, la que fue capaz de desarrollar una política sobre hidrocarburos, que le posibilitó la creación de caminos de autonomía e independencia ante las grandes multinacionales de la época”, consideró.
“Luego viene el proceso que se llevó a cabo desde 1976, fundamentalmente, y más adelante lo que acontece de 1989 en adelante, es decir, toda la política de desregulación, de privatización de nuestro patrimonio nacional, de la pérdida de soberanía, (…) la imposibilidad cierta de manejarlas de acuerdo a los intereses y a las necesidades presentes y futuras del pueblo argentino”, continuó Rigane.
“También hay una fundamentación de cómo estos recursos se exportan sin valor agregado, cómo exportamos sin incorporar mano de obra, en un país donde hay desocupación, pobreza e indigencia”, agregó Rigane, quien señaló además que el libro se encuentra “científicamente fundado”.
“Además -resaltó nuestro Secretario General- quiero valorar la contribución de Diego Mansilla porque la cultura del enemigo, en este país ha desarrollado una iniciativa de bastardeo hacia lo que tiene que ver con la energía (petróleo, gas, minerales). El objetivo ha sido el de (…) decir que estos temas corresponden sólo a los que saben: ingenieros, científicos, quienes tienen capacidades superiores. Este aporte de Diego ayuda a comprender que éste es un problema de todos. En la medida que no lo aceptemos, (…) vamos a seguir favoreciendo a los grupos multinacionales.”
“Argentina no es un país petrolero. Argentina tiene petróleo”, dijo Mansilla al momento de referirse a su investigación. “Dependemos de los hidrocarburos y las cantidades son finitas, lo que significa que tenemos que hacer el mejor uso posible de lo que tenemos”, agregó.
“Es un recurso mundialmente mal distribuido, por lo que tiene una importancia geopolítica”, ratificó. “El precio del petróleo no es una variable económica, sino una variable política”, añadió Mansilla.
“Vivimos una época que desde 1989 cambió la historia petrolera argentina, desde que el petróleo dejó de ser un recurso estratégico para convertirse en una commodity. Entonces, además de la renta”, remarcó, “tenemos que hablar del uso racional de esa energía y de la futura disponibilidad”.