Se nos fue este ser grande, de paso tranquilo, bonachón y casi siempre de buen humor, que siempre que le comentabas un problema, él te daba ánimo y te decía que “el día siguiente sería mejor”, porque comenzaría a solucionarse el obstáculo que te aquejaba.
Este “Ruso”, que siempre tenía presente sus raíces sanguíneas, inculcado por sus padres y abuelos ucranianos. Estos últimos, que vivían en campos de Los Talas, muy cerca de su Berisso natal, siempre le recordaron cosas que ellos vivieron en la vieja Rusia, contándole historias y el folclore de esa región.
Siempre tenía recuerdos de su adolescencia en el Club Vostok, de Berisso, donde se reunían todos los paisanos de la colectividad para conmemorar fechas de las fiestas regionales.
Fanático futbolero y ferviente hincha de su Estudiantes de La Plata.
Lo conocí a principio de los 80 -cuando se vino a vivir a “esta hermosa Mar del Plata” como él decía-, en un lugar muy insólito: la cárcel de Batán, pero desde afuera, porque los dos estuvimos trabajando en la construcción de la misma, estábamos en distintos sectores y no teníamos contacto de trabajo ya que éramos más de 200 trabajadores. Él estuvo en la construcción del cerco electrificado y su presencia se hizo notar rápidamente porque sus compañeros de la herrería le pusieron el apodo de “DAKTARI”, que era el nombre de una serie de ese momento y el protagonista siempre estaba rodeado de animales (dejo librado a su imaginación del por qué el apodo). Así fue como lo conocí y después por nuestras esposas, ya que concurrían a los mismos médicos de la obra social. En las primeras reuniones familiares éramos 5 personas y después del 83 completamos el grupo de familia con 8 integrantes.
Él fue, en esa época, electricista y antenista de edificios, hasta que entró en la empresa eléctrica a fines de los 80. Luego fue convenciéndome para que me anotara en la Bolsa de Trabajo del Sindicato para entrar, por lo cual le voy a estar eternamente agradecido. Ése era el Ruso, una persona sin mezquindad y siempre dispuesto a dar una mano a quien de su entorno la necesitara. Es por eso que todos los que lo conocimos no lo olvidaremos nunca.