Fuente: Agencia CTA (ACTA). Desde el año 2006 el Gobierno Bolivariano de Venezuela viene implementando una serie de medidas relacionadas a la recuperación por parte del Estado de sectores estratégicos de la economía. El 21 de mayo pasado se anunció la estatización de cinco siderúrgicas, entre ellas dos empresas Tavsa y Matesi, en las que la multinacional Techint tiene mayoría accionaria, además del Complejo Siderúrgico Guayana. En manos del Estado Venezolano están hoy la recuperación de estos recursos de vital importancia en la economía nacional, destinada al Pueblo y a los trabajadores venezolanos.
{{{ MEDIDAS AJUSTADAS A DERECHO .}}}
Un comunicado del Gobierno de Venezuela aclara que “el procedimiento adoptado e implementado” para la estatización de las cinco empresas siderúrgicas, especializadas en la producción de briquetas, “garantiza a esta empresa (Techint) la justa y pronta indemnización (*) por los activos que ahora vuelven a ser propiedad del pueblo venezolano”. .
Las medidas se ajustan a derecho y a la decisión soberana de cualquier nación de optar por el fortalecimiento de un proyecto alternativo contra el capitalismo mundial.
{{{ . EL CANTO ESPERADO .}}}
La reacción de los sectores empresarios más concentrados, tanto en el propio país venezolano como en la Argentina, fue, como era de esperar, contraria a la determinación soberana. El titular de la CGT Hugo Moyano, en clara sintonía con las Cámaras empresariales, se sumó a las críticas a la medida señalando que “eso no era lo que aprendieron de Perón”.
Tanto allí como aquí conocemos cuáles son su modelo económico y sus políticas: las que nos llevaron a la actual crisis que, originada en Estados Unidos, se expande a la mayor parte del mundo.