El diputado radical Juan Gobbi, oriundo de Chascomús, presentó un proyecto de ley para que se declare el “estado de emergencia” del sistema eléctrico bonaerense, al que tachó de estar en una “grave situación”. “Hay una notoria falta de inversión y de planificación por parte de las empresas privatizadas y del Estado, por lo que estamos muy cerca del límite o quizás de que el sistema colapse”, afirmó categóricamente el legislador representante de la Quinta Sección electoral. En ese sentido, Gobbi subrayó que “aumentó la demanda y los tendidos trabajan al límite, por ello podría haber cortes de energía en muchas ciudades, especialmente en la costa atlántica y en el interior”, y advirtió que “hay que anticiparse a los inconvenientes” y no esperar “que se produzca un problema para solucionarlo”.
El aumento de la demanda de electricidad a un sistema que presenta falencias tanto en el sistema de generación como de distribución, inducen lógicamente a preocupación. El riesgo de que sea necesario aplicar más cortes rotativos en lo que resta de la temporada, sigue estando latente. “Es un despropósito que rijan las mismas leyes de mercado en materia de servicios públicos que en la década pasada, con un Estado que no controla y deja hacer, y la concesionaria no realiza inversiones, lucra desmedidamente y no se ocupa del usuario”, aseguró el diputado Gobbi. Agregó que “los 150 millones de pesos que se recaudan por año de las facturas eléctricas se deben invertir en mejorar y extender el tendido eléctrico, y no en cuestiones corrientes como se hizo en los últimos años”. Pronóstico repetido. Ya a fines del año pasado la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) había advertido sobre posibles cortes en el suministro de energía eléctrica para la costa atlántica durante el verano 2.005. En un comunicado oficial, esta empresa de gestión privada con propósito público presentó un informe de perspectiva para el período noviembre-abril, en el que estimó que podría haber un incremento de 30 megava-tios de potencia en el pico de mayor consumo por influencia del turismo. Además, resaltó que si entrara en colapso algún grupo generador de la zona costera habría dificultades para enviar energía, con la posibilidad de cortes rotativos. La situación parece delicada si se tiene en cuenta que habría unidades de generación fuera de servicio en Mar del Plata y Necochea, y que la capacidad de generación de energía disminuyó de 291 a 167 mega-vatios.
{{{La zona de riesgo}}}
La región atlántica de distribución de energía eléctrica está compuesta por 32 municipios que abarcan una superficie que supera los 105 mil kilómetros cuadrados. En esta sección están comprendidos todos los partidos costeros desde Tres Arroyos hasta General Lavalle (entre los que se destacan por consumo eléctrico Mar del Plata, Necochea, Villa Gesell y Pinamar). También forman parte de la llamada zona de riesgo un grupo de partidos del interior provincial, tales como Tandil, Azul, Olavarría, Balcarce, Dolores y Chascomús. En esta región hay aproximadamente 420 mil clientes, que representan una población de alrededor de un millón y medio de personas, cifra que durante los meses de verano se ve multiplicada varias veces por el incesante arribo de turistas. Hay 17 subestaciones de media y alta tensión en esta zona, con casi 3.700 centros de transformación y más de 9.400 kilómetros de líneas de distribución.
{{[ver tambien «Estamos ante un sistema eléctrico decrépito»->223]}}
{{[ver tambien «Concejales se mostraron preocupados por los cortes energéticos y las bajas de tensión»->224]}}