Con el paso de los años y el desarrollo de las raíces de los árboles que la realzan, el deterioro de la vereda de nuestra institución, se fue acentuando en algunos sectores. Para reacondicionarla, desarrollamos un plan de trabajo que se cumplirá en varias etapas y que consiste en remover la parte afectada, cortar las raíces necesarias, preparar una carpeta y volver a embaldosar, incluyendo también la reparación del cordón de la misma en los lugares dañados.
¿A quién podíamos convocar para llevar adelante esta empresa?
A los esforzados: Roberto Carbajo, Omar Lanzoni y Juan Carlos Poveda. Los muchachos, que se dan maña para todo, una vez analizado el proyecto, encararon la vereda “como zorrino al tren”.
Dándole al pico y la pala, revoleando el hacha, meta cortafierro y maceta: Dejaron la entrada del garage “un pucherito” y ahora van por más, por que la cosa no se termina.