{{{A) Algo de Historia:}}}
Previo a la reelección como Gobernador, el Dr. Duhalde en 1995 manifestó que en la Provincia de Buenos Aires: “Nada se privatizaría”. Lograda la reforma constitucional que posibilitó su reelección, en 1997 la Legislatura a instancia del Ejecutivo privatizó las dos únicas empresas de servicios públicos esenciales que poseíamos los bonaerenses. La empresa eléctrica: ESEBA SA y Obras Sanitarias de la Provincia (OSBA).-
Respecto a esta última, adjudicada a la sociedad AZURIX, que dependía a su vez del grupo norteamericano ENRON (famoso por su quiebra fraudulenta), cuando llegó el momento de invertir en las obras necesarias de infraestructura, abandonó el negocio, obviamente aludiendo incumplimientos contractuales de parte del Estado Provincial, el que -amén de hacerse cargo nuevamente del servicio en situación ruinosa- debe soportar la amenaza o el juicio multimillonario por su supuesto incumplimiento, el cual es litigado ante Tribunales Extranjeros.
La situación de las empresas eléctricas, si bien diferente en cuanto los grupos adjudicatarios no han abandonado el negocio, no escapa a la regla que oportunamente esta Organización denunció {{respecto a que el único interés de las mismas era la de recaudar o hacer caja}} y si la recaudación no es lo suficientemente satisfactoria, el camino ya intentado por AZURIX es el destino obligado.
{{{B) El abandono por parte del Estado Provincial en la cuestión.}}}
Sr. Gobernador, denunciamos: 1) la falta de inversión, causa de la crisis energética en la zona atlántica; 2) la descapitalización de la empresa adjudicataria por un lado y el perjuicio a los usuarios por el otro, como es en el caso de EDEA SA, con el agregado que {{NO}} observamos una actitud activa por parte de los organismos del Estado Provincial (Ministerio de Obras y Servicios Públicos, OCEBA y Comisión Legislativa bicameral), para controlar, exigir o al menos pedir explicaciones al respecto, lo que nos hace presumir una actitud de abandono o despreocupación del poder político en la cuestión.
{{{C) La situación en EDEA SA:}}}
Esta empresa fue constituída en el año 1997. La ley que “privatizó” y desmembró a ESEBA, dispuso, en compensación por la pérdida de su condición de empleados estatales, que el 10% de las acciones pertenecieran o fueran propiedad de los trabajadores de las empresas que continuaron con la actividad de ESEBA, y que su pago se realizara mediante el denominado {{“Programa de Participación Accionaria del Personal”}} PPAP-, el cual consiste en afectar para dicho pago los propios frutos de las acciones, es decir, sus dividendos. Así también se previó que, hasta tanto las acciones estuvieran canceladas en su totalidad, las mismas integrarían un fideicomiso administrado por el BAPRO como fiduciario, y que los representantes de los accionistas /trabajadores en los órganos de la sociedad, Directorio, Asambleas y Comisión Fiscalizadora, serían designados por un Comité Ejecutivo integrado por dos miembros que designa el BAPRO y tres miembros que designan los trabajadores. Ahora bien, durante el tiempo que demore el trámite para la determinación de la cantidad de acciones que le corresponden a cada trabajador, la elección de los tres miembros del Comité Ejecutivo que deben designar los trabajadores para que los representen en dichos órganos societarios, es realizada por la “Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza” FATLyF -, entidad externa a los trabajadores de EDEA.
Dichos “representantes” {{no sólo no representan}} a los trabajadores /accionistas de EDEA S.A., sino que, junto con los representantes del BAPRO, o sea, de la Provincia de Buenos Aires, conforme sus actuaciones hasta la fecha pareciera que se ocupan de los intereses de IEBA S.A., quien es el accionista titular del 90% de las acciones de EDEA S.A. y que controla su voluntad social, cuyos socios son Buenos Aires Energy Company S.A. con un 55% (controlada a su vez en un 100% por Camuzzi Argentina S.A.) y United Utilities International Ltd. en un 45%; por cuanto han actuado en perjuicio de los intereses de la sociedad, de los trabajadores / accionistas y lo más grave, de los destinatarios de los servicios que la misma presta; o sea, la comunidad de Mar del Plata y gran parte de la Provincia de Buenos Aires.
Mientras tanto, EDEA S.A., o más bien sus principales accionistas (IEBA), han impedido -demorando y entorpeciendo con todos los medios y argucias a su alcance- la efectiva distribución de las acciones pertenecientes a los trabajadores, intentando evitar la participación de los mismos en los órganos sociales, buscando mantener a los actuales representantes designados por el BAPRO y la FATLyF.
{{Siete años han pasado desde la creación de EDEA S.A. y el PPAP aún no se encuentra implementado en su totalidad.}}
Mientras tanto, los “representantes” de los trabajadores (no elegidos democráticamente), designados por el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, juntamente con la FATLyF, han permitido que:
– EDEA S.A. haya pagado a IEBA S.A., hasta diciembre de 2003, la suma de más de $ 51.000.000, por la actuación de IEBA S.A. como operador, es decir aproximadamente el 3% de su facturación bruta, siendo que la única actividad desarrollada por esta última es ser tenedora de las acciones de EDEA S.A. ;
– EDEA S.A., en el año 2001, ha contraído préstamos con terceros a una tasa del 18% anual, a efectos de otorgarle créditos a IEBA, su controlante, a una tasa del 12%, lo que le significa una pérdida real para EDEA de más de $ 1.500.000 por año, con el agravante que finalmente terminó condonándole la deuda de más de $26.000.000 pasados un par de años, sin que por ello hubiere recibido el mismo trato de sus acreedores con quienes ha contraído dichos préstamos. ¿EDEA le ha prestado dinero a una empresa en cesación de pago, o contribuyó a endeudarla para que se concurse?
_ No existe control, supervisión ni objeción alguna realizada por los representantes de los accionistas minoritarios -los trabajadores- ni en las asambleas, ni en las reuniones de Directorio, ni en la Comisión Fiscalizadora. Camuzzi Argentina y United Utilities International, actúan y funcionan con total impunidad como si EDEA los tuviera como únicos accionistas, en beneficio de ellas y en perjuicio de la propia sociedad, con el consentimiento, claro está, del BAPRO.
_ No conforme con ello, también pese a tener una tarifa en donde los costos incluían 683 trabajadores bajo régimen convencional, EDEA SA nunca cumplió con esa obligación y hoy, con 570 trabajadores convencionalizados, debe recurrir al sistema de tercerización el cual obviamente redunda, sea por costos, por responsabilidad, en un beneficio más al afán de recaudar, que al de prestar un mejor servicio y más barato.
{{{D) Las consecuencias obvias:}}}
A este paso, EDEA S.A. corre el riesgo de no poder continuar con su actividad, por lo que las consecuencias serán sufridas por los usuarios del servicio eléctrico, debido al probable incremento de su costo para poder continuar prestando dicho servicio, y ello sin perjuicio de que muchos trabajadores pierdan su fuente de trabajo.
La pregunta es: {{¿a quién le atribuirá entonces la culpa el Gobierno de la Provincia?}}, que claramente es el mayor responsable por no cumplir con las funciones de contralor que tiene asignadas por ley: {{¡¡Probablemente a intereses extranjeros!!.}}
Estamos cansados de todas esas excusas. La Provincia de Buenos Aires, que privatizó ESEBA y creó esta situación, tiene la facultad de controlar la forma en que se debe implementar el PPAP y el cumplimiento de las cláusulas del contrato de concesión, y su silencio a través de estos siete años, frente a una demora inexplicable, la hace cómplice de la actitud retardataria adoptada por Camuzzi Argentina y United Utilities International, como también de la precaria situación patrimonial en que las mismas van a dejar a EDEA S.A.
Este incumplimiento configura una falta grave, pasible de ser analizada en la Provincia con el fin de rescindir el contrato de concesión por incumplimiento y una muestra de dicha voluntad fiscalizadora sería la intimación por parte de la Provincia a EDEA, para el cumplimiento de la obligación desatendida, bajo tal apercibimiento.
{{{Sr. Gobernador: No queremos que nuevamente nos pase lo de AZURIX. No sirve de excusa saber que “el hombre es el único mamífero que tropieza dos veces con la misma piedra”.}}}
Mar del Plata, 28 de octubre de 2004