Nuestra relación con los empleadores tiene un carácter distinto al del ideal individualista que domina la propaganda social que induce al éxito competitivo e individual.
Como trabajadores, constituimos un colectivo, un conjunto, que se reconoce como parte de una clase diferenciada de la sociedad y que subsiste gracias al salario que recibe por aportar esfuerzo físico o intelectual (trabajo) a la producción, distribución o difusión de los bienes y servicios que utiliza el conjunto de la sociedad.
Esta clase diferenciada, la clase trabajadora, requiere, para disputar derechos laborales o retribuciones salariales mejores, de un reconocimiento de su propia existencia por parte de sus integrantes y de una organización que logre instalarse en el consenso social con legitimidad y legalidad.
Esta introducción se puede traducir sencillamente cuando se afirma que los trabajadores necesitan contar con organización propia, el sindicato, para discutirle al empleador el salario y la vigencia de los derechos.
El tránsito hacia una mejora salarial, o la búsqueda de la estabilidad laboral, o la participación de los trabajadores en la toma de decisiones empresarias, o la duración de la jornada de trabajo, los descansos y vacaciones; son motivos de discusiones y conflictos que obliga a la participación colectiva de los trabajadores, construyendo a partir de estrategias consensuadas, relaciones de fuerza con los empleadores o los sectores sociales que enfrentan los objetivos de los trabajadores.
Las relaciones de fuerza entre los trabajadores y los empleadores son siempre transitorias y la permanencia de una determinada situación, favorable o desfavorable, depende de la organización que se logre y de la voluntad colectiva de mantenerse en una permanente defensa de sus intereses.
Cuando al colectivo de los trabajadores se lo fuerza a integrarse a una única organización sindical (unicato), o no se le reconoce el derecho a constituir nuevas organizaciones o cuando estando estas constituidas se las desconoce, como sucede con la Central 9 de Julio, respecto al Luz y Fuerza Mar del Plata, y se llevan adelante estrategias de mejora salarial y de plantel sin que se busque el acuerdo sindical, se intenta una elaborada y sofisticada estrategia de enfrentamiento, que induce al trabajador a relajar su integración sindical y a mantener relaciones de fuerza con colectivos fragmentados (sectores) que en algún momento deberán reconocer su incapacidad para sostener situaciones favorables.
El reconocimiento de esta situación en una etapa temprana, dará lugar a un reacomodamiento de fuerzas y a la recuperación sindical de su capacidad negociadora colectiva.
Para avanzar en este último aspecto es necesario llevar delante una tarea de discusión en principio con el cuerpo de delegados a fin de conocer los detalles de los alcances y desarrollo de la actitud patronal y llegar a una asamblea de la Central, donde se confirme fuertemente la representación sindical y se lleve a la empresa a una discusión donde salarios y planteles se encuentren en la agenda, pero también la repotenciación urgente y la eliminación de los caros y ambientalmente nefastos generadores de baja potencia, instalados únicamente para favorecer la existencia de negocios que no tienen nada que ver con las necesidades de energía en la provincia de Buenos Aires y ponen en peligro la permanencia de la fuente de trabajo para todos los trabajadores.
{{Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina, FeTERA – CTA}} José Rigane, Sec. General / Oscar Lagos, Sec. Gremial / Gabriel Martínez, Sec. Organización e Interior / Néstor Iparraguirre, Sec. Política Energética y Medio Ambiente / José Luis Matassa, Sec. Relaciones Institucionales e Internacionales / Julio Acosta, Sec. Administración y Finanzas / Ana María Sacchi Sec. Actas y Previsión / María Sosa, Sec. Acción Social / Humberto Diez De Los Ríos, Sec. Formación / Luis Enrique Torrilla, Sec. Prensa Y Propaganda / Daniel Martínez, 1º Vocal Titular / Rubén Méndez, 2º Vocal Titular / Carlos Alberto Granero, 3º Vocal Titular / Alfredo Leonardo Seydell, 1º Vocal Suplente / Ernesto Simionato, 2º Vocal Suplente / Carlos A Guanciarrosa, 3º Vocal Suplente / Rodolfo López, 1º Rev. Cuentas Titular / Jorge Alberto López, 2º Rev. Cuentas Titular / Carlos Horacio Rossetti, 3º Rev. Cuentas Titular / Horacio Héctor Rover, 1º Rev. Cuentas Suplente / Roberto González, 2º Rev. Cuentas Suplente / Isaac Gurovich, 3º Rev. Cuentas Suplente.