El inicio del juicio oral por el asesinato de Mariano Ferreyra, donde diez civiles y siete policías serán juzgados en Comodoro Py en tanto responsables materiales, intelectuales y logísticos de este crimen político, es una oportunidad importante para que el movimiento obrero y la sociedad en su conjunto discuta, repudie y se movilice para poner fin a las aún vigentes prácticas empresariales de tercerización y precarización laboral.
La tercerización es una estrategia patronal vil y grosera que ha adquirido un carácter estructural con la profundización del ideario neoliberal de los 90 y que hoy sigue vigente con preocupante presencia en el ámbito privado como así también en el empleo público.
No sólo “baja los costos salariales”, sino que aumenta esas extraordinarias y apabullantes ganancias empresariales que la presidenta se jacta en propiciar. También, deteriora los derechos y conquistas históricas de los trabajadores, coloca nuevos “pisos” gremiales y fragmenta al propio movimiento obrero.
Creemos que hay que acabar ya con estas prácticas laborales. Es el propio Estado, el poder político, legislativo y judicial los que deben implementar las medidas necesarias para cambiar esta situación. Pero bien sabemos que de nosotros depende para que esto suceda. Es en este sentido que resulta necesario que las organizaciones de los trabajadores sean autónomas, que contengan todo nuestro empuje como movimiento obrero y aporten a la movilización popular.
Creemos que se hace necesario retomar la discusión sobre la democracia sindical y quebrar el modelo gremial-empresario-estatal, que junto con las patotas como mano de obra ejecutora, causaron el asesinato del compañero Mariano Ferreyra.
Pedimos prisión perpetua para Pedraza y todos los responsables directos e indirectos, para que no quede impune el asesinato de Mariano Ferreyra.
Basta de trabajo en negro, pase a planta de todos los trabajadores sobreexplotados, flexibilizados y tercerizados.
Justicia por Mariano Ferreyra.