Nuestro Secretario General, José Rigane, viajó a México en representación de la CTA para participar del «Seminario de Reflexión Estratégica, hacia una nueva Central de Trabajadores». Compartimos la entrevista que le realizaron los compañeros del Sindicato Mexicano de Electricistas
El compañero José Rigane, Secretario Adjunto de la CTA viajó a México para participar del “Seminario de Reflexión Estratégica, hacia una nueva Central de Trabajadores”.
Los días 19 y 20 de julio, en el Centro Vocacional de Oaxtepec en el Distrito Federal, México se realizó el “Seminario de Reflexión Estratégica, hacia una nueva Central de Trabajadores” que organizó la Junta Promotora de la Nueva Central que está integrada por representantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), de la Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE); de la Alianza de Tranviarios de México (ATM); el Sindicato de Trabajadores del Transporte Público del DF (STTPDF); la Central Unitaria de Trabajadores (CUT); y el CILAS.
Nuestra Central estuvo representada por el Secretario Adjunto, José Rigane, quien participó junto a Jorge Bermúdez de la Central uruguaya PIT – CNT, y Rafael Chacón de CSBV de Venezuela. Los compañeros de la CUT de Brasil fueron invitados pero no pudieron asistir.
Los representantes de las delegaciones internacionales participaron del panel “Compartiendo Experiencias y Visiones Estratégicas de Centrales Sudamericanas” en donde los compañeros expusieron las distintas visiones estratégicas de las centrales que llevaron a su fundación y posterior desarrollo en el campo social, sindical y político.
Entrevistado por el Sindicato Mexicano de Electricistas, Rigane explicó que la creación de la CTA fue “bajo la necesidad de defender los derechos, reivindicaciones e intereses de los trabajadores. Para esto fue necesario construir una central que recupere las mejores tradiciones de lucha del movimiento obrero argentino. En este sentido, había que recuperar la democracia interna, el protagonismo de los trabajadores, la participación; había que demostrar que la dirigencia iba a hacer no lo que quería, sino lo que las bases decidían”.
Durante la intervención en el Seminario, Rigane afirmó: “Queremos construir poder propio para la transformación en beneficio de la sociedad, y de los trabajadores principalmente. Buscamos la construcción de la unidad de lo diferente en el proceso de liberación, de acuerdo con el objetivo final de emancipación de los trabajadores. El concepto de poder propio consiste en no delegar más: ser sujetos conscientes”.
Además, de conocer las experiencias sindicales de Sudamérica se debatió sobre las “Perspectivas y Retos de una Nueva Central en la Coyuntura Actual”; “Perspectivas y Retos de una Nueva Central en el Estado Actual del Movimiento Social y Sindical”; y “El Proyecto de la Nueva Central de Trabajadores”.
¿Por qué una nueva Central de Trabajadores en México?
Con la aplicación de las políticas neoliberales, analizan los trabajadores mexicanos, “desde 1975 el poder adquisitivo del salario se ha desplomado en un 80 por ciento. El desempleo real, no el imaginario de las cifras oficiales, rebaza el 20 por ciento de la Población Económicamente Activa y el empleo informal alcanza a otro 30 por ciento. Existen 8 millones de jóvenes que ni estudian ni trabajan. La precarización del trabajo avanza en todas sus formas. La estabilidad en el empleo se desvanece. Los contratos temporales se han constituido en la norma. Los trabajadores son sometidos a intensas cargas de trabajo –sin ningún respeto a normas mínimas de seguridad, higiene y capacitación-, y sin el pago de horas extras. Las autoridades laborales se han convertido en agentes patronales para legitimar despidos, cierres de empresas, recuentos fraudulentos y demás atrocidades. El derecho a la jubilación es acotado sistemáticamente y cada vez hay que ser más viejos y resignarse a menores pensiones para jubilarse, además de que los fondos de ahorro han sido privatizados, quitando responsabilidades a patrones y Estado, y son objeto de la especulación financiera. Especialmente los jóvenes tienen un futuro marcado por el empleo precario e inestable”.
Además, el nivel sindicalización de los trabajadores formales es muy bajo y, por otro lado, “México es de los países en donde más divididos y fragmentados están los trabajadores” porque existen decenas de centrales sindicales, predominando un sindicalismo entreguista y al servicio de los intereses de los poderes económicos más concentrados.
Pero, y como lo afirman desde la misma Junta Promotora de la Nueva Central, “después de haber conseguido desarrollar un importante segmento de trabajadores en el sindicalismo independiente y democrático; después de haber fundado polos unitarios como la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y el Frente Sindical Mexicano (FSM), hace ya más de diez años que no hemos sido capaces de dar un nuevo paso en la unidad indispensable de estos destacamentos y de englobar a muchos sindicatos y movimientos que no se encuentran en cualquiera de ellos. Y ni qué hablar de haber desarrollado toda una estrategia de apoyo para la organización de los no organizados, de una verdadera disputa por la contratación colectiva con las mafias sindicales”.
Conclusiones del Seminario
Entre los puntos más importantes del Seminario se puede destacar:
– Que es necesario constituir una Central Sindical que aglutine a los trabajadores del campo y de la ciudad, a los trabajadores del sector formal e informal, a las mujeres y jóvenes trabajadores, trabajadores sexuales, migrantes, a las trabajadores domésticas, niños, jubilados y pensionados, en fin a todos aquellos que viven de su fuerza de trabajo, una Central que tenga entre sus objetivos la defensa derechos laborales, pero también sociales y políticos.
– Una Central Sindical Clasista, con autonomía como principio universal, anticapitalista, independiente con respecto a los patrones, al gobierno y a los partidos políticos, que combata el trabajo precario.
– Una Central que tenga una estructura y estatutos que deben tener la identidad de clase como eje rector, así como los conceptos que se han formulado a lo largo del Seminario: autonomía, emancipación social, liberación nacional o descolonización e Internacionalismo.
– Que la formación sindical/política deberá ser un tema prioritario en el diseño de la estructura y los contenidos de los estatutos, por ser una necesidad fundamental para los afiliados.
– La Central Sindical se articulará con otros sectores y movimientos sociales para la defensa de la Nación, para ello habrá que construir una política de Frente Amplio y de unidad de acción.
Por último, los trabajadores que participaron del Seminario definieron un “Calendario de acuerdos” que incluye la realización de espacios de reflexión similares en el resto del territorio mexicano, la difusión de la nueva central para que se sumen más organizaciones y la realización de un Pre-Congreso para los próximos meses, pasos previos a la realización del Congreso en donde se realizará la efectiva fundación de la Nueva Central Sindical. *Por equipo de comunicación Luz y Fuerza Mar del Plata