Por Prensa Luz y Fuerza Zárate / sindicatolyfzarate@gmail.com
El pasado viernes, decenas de compañeros del sector energético se congregaron en la sede sindical de Luz y Fuerza de Zárate, convocados por el plenario de la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina. Estuvieron presentes dirigentes nacionales de la CTA Autónoma, entre ellos su Secretario Adjunto y Secretario General de la FeTERA, José Rigane.
La problemática de la precarización, la matriz energética y la corrupción que llevó a desmantelar parte del potencial energético del país fueron los ejes centrales de un debate que concluyó que una de sus principales tareas es fortalecer los lazos con las organizaciones de la sociedad civil. El Secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate, Jorge Tálamo consideró que “lo fundamental es defender el sistema energético cómo un derecho humano universal. Esto significa que tenemos que tomar acciones para evitar que este derecho tenga un acceso restringido de la población. Aun hoy hay millones de personas que no pueden acceder a distintos tipos de servicios de energía”. Para Tálamo el plenario regional fue “diez puntos, muy satisfactorio y positivo, con mucha participación”.
José Rigáne, agradeció el esfuerzo de la convocatoria “que es ni más ni menos que la efectivización de un mandato dado por el Congreso de la FeTERA” en marzo pasado.
Del encuentro participaron delegados del sector energético nuclear, de cooperativas eléctricas y ‘energía deliverý’, entre otros. El dirigente nacional, destacó el “esfuerzo por interrelacionarse y coordinar un mejor desarrollo organizativo” y puso como objetivo profundizar la formación en materia convencional.
Perspectiva general
Al inicio del Plenario Regional que duró desde las 9 a las 17 horas, los referentes de la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma, Carlos Chile y Jorge Cardelli, dirigieron la palabra a los trabajadores presentes. Chile insistió en el sostenimiento del valor de la autonomía “porque es la clase la que tiene que impulsar el modelo de país que garantice educación, vivienda y salud”. Para el Secretario de Organización de la CTA Nacional, el trabajo digno es la respuesta para ir camino a un modelo que garantice la “universalidad de derechos, entre ellos la energía, que es un derecho humano”. “Soñamos un país donde abran las fábricas, donde haya muchos trabajadores, muchos técnicos como ustedes. Gracias por seguir peleando”, concluyó.
Por su parte, Cardelli consideró que “la concepción de la Argentina agroexportadora esconde la visión de que la única salida es la dependencia vía inversión extranjera”. Calificó al gobierno de Mauricio Macri como el de “los monopolios imperialistas” y criticó sus políticas de ajuste “vía despidos para disciplinar a los trabajadores y bajar salarios”. Valorando el proceso crítico abierto por diversos sectores, entre ellos el sindicalismo y la Iglesia, previó que “por un tiempo importante el poder protagónico de la lucha lo tienen los trabajadores” por lo cual consideró fundamental “debatir y encontrar nuestra unidad”.
El Secretario General de Luz y Fuerza de Zárate, Jorge Tálamo, definió: “no somos K ni Anti K, ni de izquierda ni de derecha, somos un sindicato que defiende los derechos de los trabajadores”. Recordando que hasta la década del ´90 “estábamos en condiciones de autoabastecernos de energía nuclear y estuvimos a la vanguardia mundial”, evaluó como nodal “la unidad de acción para que los trabajadores recuperen el terreno perdido”. Una unidad que, consideró, “va a surgir desde abajo, no desde arriba, va a aparecer cuando algunos dirigentes dejen de lado sus intereses sectoriales”. Duro con el gobierno nacional subrayó que éste “ve al Estado como una empresa o negocio”, por lo que ratificó el compromiso de “transmitir y generar ideas” para poder “ir a la vanguardia junto a las organizaciones de la sociedad civil contra los tarifazos energéticos”. En sintonía, el dirigente de la FeTERA, Gabriel Martínez, sintetizó que “articulación es una palabra que se llena de experiencias propias en la práctica concreta hacia una transformación social, que debe ser con más solidaridad, justicia social e igualdad”. Fernando ‘Perico’ Pérez, Secretario General de ATE Zárate, destacó la necesidad de tomar el tema despidos tras la desvinculación de trabajadores de UOCRA de lo que es la construcción de la cuarta central nuclear, exigió la reincorporación de 600 trabajadores y denunció la “corrupción” en Atucha.
Uno de los sectores más pauperizados es el de la energía delivery, presente también en el Plenario de FeTERA. Javier Garnica, de Secco, recordó que pudieron superar “la precarización extrema por estar organizados y eso nos permitió discutir la problemática energética”. Cuatro años atrás no tenían siquiera baños durante su jornada de trabajo, hoy mediante su participación en FeTERA mejoraron su situación y hasta generaron una bolsa de trabajo para “parar la puerta giratoria de las contrataciones”.
“El problema de la precarización y la contratación, está instalado en el movimiento obrero argentino y no deja de expresarse en el ámbito energético. Por eso lo primero que se intentó fue despedir a los contratados o subcontratados del sector construcción de Atucha. Lo que uno piensa es que se va a parar el proceso de construcción. Y necesitamos cambiar la matriz energética, hacia una más equilibrada, para no depender de los hidrocarburos y porque la diversificación de la matriz nos habilita a tener mayor equilibrio. Respetando como condición sine qua non de respetar el medioambiente”, sintetizó Rigáne. Llamó a las autoridades a “no tirar por la borda la trayectoria argentina en el ámbito nuclear”. “Si nos quedamos sólo con el diagnóstico, nos quedamos sin capacidad de construir. Nosotros queremos construir para transformar, para mejorar”, afirmó.
Hacia otra matriz
Como acostumbra en sus encuentros, la FeTERA resaltó la ya mencionada modificación de la matriz energética. El Secretario General de APECONEA Agustín Arbor, conocedor como pocos del ámbito nuclear, llamó en primer lugar a “recordar que somos los trabajadores los que desarrollamos todo esto”.
Especificó que la provisión de energía en el país se compone de: un 63% de combustibles fósiles, un 30% de hidrocarburos, 5% nuclear y el resto de otras energías alternativas. La potencia instalada en el país actualmente es de 32 mil MW. “Debemos usar todas estas fuentes en función de los recursos sin olvidar la compatibilidad con el medioambiente”, pero para ello Arbor consideró necesario cambiar el porcentaje de aporte de cada una de esas fuentes: menos uso de fósiles, más energía nuclear y desarrollar fuertemente las alternativas (eólica, solar, geotérmica). “Sin energía no hay posibilidad de desarrollo económicamente posible”, definió y rememoró que en el pico de consumo este verano hubo una faltante de ni más ni menos que 7mil MW.
Suponiendo que el incremento de la demanda anual eléctrica rondará el 4-5%, para 2030 debería duplicarse la capacidad instalada (70 mil MW) “¿Con qué los vamos a generar?”, se preguntó el técnico y respondió: “la energía debe ser una cuestión de política de Estado”, particularmente en un mundo donde “hay hambre energética, con 1800 millones de personas sin acceso a la energía”. Es este sentido, resaltó que la energía de origen nuclear demanda a diferencia de otras, de microminería pues con gramos de uranio se solventa lo producido con macro medidas de otras fuentes, como carbón, petróleo o gas. Alertando sobre la pérdida de capacidad intelectual a nivel nacional en una materia en la que Argentina supo ser vanguardia, consideró que parte de la solución “es poder hacer un reactor nuclear propio con cabezas y materiales nacionales”. Por eso instó a que la cuarta central “tenga preponderancia en suministros nacionales”.