Ante la ofensiva planificada contra el mundo del trabajo y el bien común emprendida por el gobierno de la Alianza Cambiemos, las Centrales CTA de los Trabajadores, CTA Autónoma junto al Frente Nacional Multisectorial 21F y el Frente Sindical por un Modelo Nacional, construimos en la máxima unidad la convocatoria a un paro general y nacional con movilización.
- El levantamiento de las retenciones a las exportaciones de productos primarios (soja y minería) e industriales,
- La flexibilización de normas de liquidación de divisas para los grandes exportadores,
- Los progresivos aumentos a las tarifas de los servicios públicos,
- La caída del salario,
- La pérdida del empleo,
- El cierre de la pequeña y mediana empresa,
- La pérdida diaria del poder adquisitivo de la ciudadanía,
- La incontrolable inflación de los precios de bienes básicos de consumo (en especial alimentos y medicamentos),
- El abandono y destrucción sistemática de las instituciones de política universal del Estado (Salud y Educación).
Estas son, entre otras, las consecuencias de las regresivas políticas de ajuste que tienen por único fin: la transferencia de recursos y riquezas de los sectores de la sociedad que menos tienen hacia los sectores más ricos y poderosos.
Este modo de gobernar destinado sólo para los monopolios locales y multinacionales, que avanza sin medir las consecuencias sociales y económicas que tiene sobre las grandes mayorías de nuestro país, representa claramente intereses que no son los del pueblo trabajador, sino los de un establishment anti obrero y oligárquico, aliado a intereses imperialistas que promueven el saqueo de todos los bienes soberanos de la Patria.
Cada una de las medidas del régimen macrista, apuntan contra los trabajadores y trabajadoras, asfixiando a las familias argentinas, y empujando a grandes sectores de la población por debajo de la línea de pobreza. Tal como lo demuestran tanto índices oficiales como privados, un tercio de las personas que habitan la nación se encuentran en situación de pobreza.
En la ciudad de Mar del Plata, debe agregarse la dramática y recurrente situación de ser la ciudad con mayor desocupación del país, realidad que acrecienta todas las problemáticas sociales que oprimen a la clase trabajadora.
No hay precedentes en la historia de nuestro país de un endeudamiento externo tan vertiginoso y vergonzante, que empeña el futuro de la Patria, que nos es otra cosa que el futuro de nuestros hijos e hijas. Esta política de endeudamiento lejos está de ser el sustento del desarrollo de las fuerzas productivas del país, por el contrario, los argentinos somos testigos y rehenes del saqueo sistemático de la riqueza nacional a través de la bicicleta financiera y la posterior fuga de capitales financiadas por la deuda pública, embargando el bienestar de las generaciones venideras para saciar la codicia de las corporaciones multinacionales y el imperialismo financiero.
Las inmensas mayorías de nuestro país ya no soportan la miseria y el hambre que producen las políticas de Mauricio Macri en la Nación, y de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires.
Desde Ushuaia a la Quiaca, el descontento generalizado empuja a la población a las calles a reclamar en contra del plan económico de ajuste y represión del mal gobierno de Cambiemos. Y así se hizo sentir el pasado 4 de abril, día en que se movilizaron desde el trabajador desempleado hasta el pequeño y mediano empresario, pasando por entidades profesionales y cámaras de rubros productivos de todo tipo. Demostrando así la transversalidad del impacto del modelo de gobierno actual, que afecta a la totalidad de los agentes de la cadena de producción, generando el cierre indiscriminado del comercio y la industria argentina.
Estas son las consecuencias de la larga noche del neoliberalismo que azota a los pueblos de América Latina hace ya varias décadas. Pero un pueblo que no se rinde es un pueblo que aún es capaz de conquistar su autodeterminación soberana y su felicidad. Es ante la injusticia de un gobierno sordo a los deseos y derechos de su gente, que las organizaciones libres del pueblo se unen en la acción para poner un freno al saqueo y el ajuste. Buscando construir así, el camino hacia la verdadera justicia social.
Es por ello que los abajo firmantes exigimos el llamado urgente a las instituciones de la democracia a una mesa de diálogo con la firme convicción que si no tenemos respuesta vamos todos al PARO NACIONAL CON MOVILIZACIÓN.
Exigimos, además, con carácter de URGENTE al Parlamento nacional la sanción de la emergencia alimentaria y nutricional, la tarifaria, habitacional y ocupacional, ante la incontrastable realidad de los índices de indigencia y pobreza.
MULTISECTORIAL 21F
FRENTE SINDICAL POR UN MODELO NACIONAL
CTA AUTÓNOMA
CTA DE LOS TRABAJADORES