El Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate (FeTERA-CTA) denuncia a NASA por despedir al Secretario Adjunto de esta organización, Damián Straschenco.
“Perverso y antihumano es el accionar de la empresa estatal controlante de las Centrales Nucleares Atucha I y II, con anuencia de autoridades judiciales y la administración política actual”, denunciaron desde el Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate.
En una numerosa asamblea de afiliados se repudió este martes el despido discriminatorio y antisindical del dirigente, considerándolo el objetivo final de una serie de hechos de extrema gravedad.
Desde el año 2015, nuestro Secretario Adjunto venía siendo perseguido sindicalmente a través de un sumario interno de carácter fantasioso y rebuscado caratulado como “Presuntas irregularidades”.
Para ello la NASA procedió a abrir un expediente ante el Juzgado Federal solicitando al Juez que le permitiera llevar adelante dicho sumario, sin especificar el daño ni las medidas disciplinarias que pensaba adoptar; lo cual viola lo que expresamente marca la ley ; para el caso de trabajadores bajo la protección de la tutela sindical.
A pesar de no cumplir con las normas legales, la Justicia Federal abre la causa (cuando en realidad la debería haber desestimado la pretensión) y le habilita a la NASA proseguir con un sumario, que llevó más de 30 meses concluir. En dicho sumario la NASA se había comprometido a aportar testigos y videos que demostraban los supuestos hechos denunciados, pero “llamativamente” al momento de tener que presentarlos ante el Juzgado Federal, no hace lo propio y desiste de aportarlos.
O sea que inicia un sumario (que le lleva más de 30 meses concluir) con supuestos testigos presenciales de los hechos y videos que respaldarían sus dichos, y al momento procesal de hacer concreta la denuncia y exponer ante la Justicia Federal, no lo hace.
O sea que estuvo durante todo ese lapso expresando y diciendo que existía un hecho determinado denunciado que fundamentaría con testigos y documental, que termina no haciendo en sede judicial.
O sea durante todo este tiempo transcurrido se vino instalando entre todo lugar posible, y en particular entre los trabajadores de NASA; que los hechos denunciados fueron de tal y cual manera, que se tenía todo documentado, que se tenían los testigos que respaldaban todo, pero al momento de tener que hacerlo ante el Juez, NASA no lo hizo.
Lo que sí hace NASA, es despedir a nuestro Secretario Adjunto Damián Straschenco, y llamativamente también despedir varios trabajadores más que sí fueron testigos de lo que realmente habría sucedido.
En la década del 40, el agente de propaganda nazi, tenía como premisa el siguiente lema: “Miente, miente, miente que algo quedará, cuando más grande sea una mentira más gente la creerá”
Por eso no nos sorprende que el despido de Damián Straschenco se empalma con el “insólito” cambio de carátula que ahora nos estaría explicando por qué la victima de intento de homicidio no era aceptada como querellante. El Juez Federal Andrés González Charvay ahora aceptó a NASA como querellante y a Damián Straschenco como involucrado en un intento de “sabotaje”.
Sucede que luego del envenenamiento de Straschenco el pasado 9 de mayo en la Central Nuclear, donde supuestamente alteraron su bebida personal con agua pesada contaminada del reactor, la empresa no cesó en su maniobra persecutoria; que nuestra organización no cesó de denunciar.
La primera medida fue confinar a la víctima y otros integrantes de la Comisión Directiva en las afueras del establecimiento laboral, en un sitio llamado ‘Wano’, junto a Gendarmería Nacional.; al mismo tiempo que les impidió el ingreso a realizar sus labores normales y habituales.
Ya esa sola acción violaba los derechos laborales del Contrato de Trabajo, Convenio Colectivo de Luz y Fuerza; sino también las leyes de protección y tutela sindical, en particular la ley 23.551.
Cómo pareció no alcanzar con esto, de mantener aislados a nuestros dirigentes del resto de los trabajadores; que NASA vuelve a insistir con violentar las leyes laborales, al pretender imponer vacaciones y francos compensatorios a cada uno de los trabajadores, fuera de toda lógica y respeto legal. Se denunció a la justicia de lo actuado por la empresa, y fue el mismo Juez Andrés González Charvay; quién dispuso dejar sin efecto en forma inmediata, para revertir ésta nueva medida arbitraria de NASA.
Todas y cada una de éstas irregularidades y violaciones a las leyes laborales y sindicales fueron debidamente denunciadas a las autoridades competentes y de aplicación, en ésta oportunidad la Cámara de Apelaciones Federal de San Martín; y a la fecha se ésta a la espera de un dictamen favorable, para la reinstalación de los trabajadores a sus puestos de trabajo, siendo que todavía siguen aislados y sin tareas asignadas en el sector denominado “Wano”.
Recordemos que los hechos ocurridos el día martes 9 de mayo, en el marco judicial, fueron caratulados para su investigación como intento de homicidio, ya que los niveles radiológicos que llegaron al organismo de Damián Straschenco significan, a futuro condiciones de salud de carácter imprevisibles, que pueden ocasionar complicaciones en su salud ya que a la fecha continúan esos elementos radioactivos en su cuerpo provocando un futuro incierto para nuestro compañero.
Cabe remarcar que las mediciones radiológicas corporal anualmente permitida para quienes tienen acceso al área restringida del reactor son de 20 milisievert, y que Damián Straschenco recibió una dosis de 132,7 mSv, por lo que la intoxicación es exponencial.
No hace falta ser un profesional médico o especialista en radiología para evaluar seriamente que los efectos concretos sobre su salud y vida son incalculables, imprevisibles e irreversibles.
Si se sostiene la hipótesis de sabotaje, pasa a ser insólito pensar que alguien, que tiene por delante un futuro laboral y familiar estructurado y consolidado, se produzca a si mismo un daño de tal magnitud, que termine afectando, no sólo su vida sino potencialmente todos quienes lo rodean, con la posibilidad de llegar a tener derivaciones orgánica que detone en una enfermedad, que ponga en riesgo su vida.
No obstante ese cuadro de situación de gravedad para la salud de Damián Straschenco, en fecha reciente el Juez González Charvay decidió recaratular la denuncia que hizo el propio Straschenco, y la pasó a llamar intento de sabotaje, por lo que ahora Straschenco pasó a ser denunciado por la empresa Nucleoeléctrica Argentina S.A.
Por eso no resulta extraño, que al borde de la prescripción del sumario administrativo, la empresa Nucleoeléctrica Argentina S.A. reactivó el mismo y decidió despedir a Straschenco y otros trabajadores, y al mismo tiempo la Justicia Federal ahora “transformó” al dirigente en victimario, bajo la acusación de sabotaje.
No deja de resultar más extraño, que la investigación de la Justicia Federal parece que sólo se remite a recibir, avalar y dar por cierto lo aportado por NASA, por medio de una Comisión de Eventos.
O sea que Justicia Federal parece delegarle a la empresa Nucleoeléctrica Argentina S.A. que se investigue a si misma, y no llega a considerar ninguna otra hipótesis posible, que la única aportada por NASA.
Concretado el despido, queda develada cual fue, desde el primer momento la intención de la empresa, que lejos de colaborar para el esclarecimiento de los hechos, fue desplazar de su trabajo a Damián Straschenco; y pretender disciplinar a la entidad gremial.
No alcanzó con un sumario sin pruebas, ni testigos.
No alcanzó con despedirlo.
Ahora, también el Juzgado Federal lo transforma en un victimario.
De más está decir que estamos ante Nucleoeléctrica Argentina S.A. una empresa del estado nacional, con un peso y poder que condiciona hasta la justicia.
Y de nuestra parte, podemos encontrar una organización sindical libre de pensamiento y de acción, que ha podido lograr alcanzar el reconocimiento entre los trabajadores de la energía y en la comunidad de Zárate, fue con mucho trabajo y esfuerzo cotidiano, con el sólo fin de mejorar la calidad de vida y el bienestar para todos sus afiliados.
Ese fue siempre nuestro norte, y los trabajadores de la energía nuclear lo saben muy bien.
En la órbita de la energía nuclear, somos una organización social y sindical más, que busca lo mejor para los trabajadores, siempre dentro del marco de las leyes laborales, convencionales y sindicales.
Desde ese lugar, tal vez nunca podremos llegar a dimensionar los alcances de las operaciones o maquinaciones que se puedan llevar a delante para hacer “desaparecer” a una institución sindical que no se entrega al poder político de turno ni a las grandes corporaciones Gremiales, que representan a otro caudal de trabajadores en las Centrales Nucleares I y II.
Seguramente, para pretender alcanzar ese objetivo, no deben tener límites ni miramientos, por todo lo expuesto aquí.
Cuando se produce el atentado contra la vida de Damián Straschenco nuestro Sindicato venía denunciando a NASA por el intento de flexibilizar las condiciones laborales, con el peligro y la pérdida de derechos laborales que conllevaría.
En noviembre del 2016 nuestra organización solicitó participar en las paritarias y mesas de negociación colectiva de NASA ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, y a la fecha todavía no tenemos respuesta, no obstante haber pasado más de 10 meses.
Luego fue presentado ante las autoridades laborales una denuncia por incumplimientos convencionales; que llevó a los trabajadores a medidas de acción directa en diciembre del 2016; y sea dicho de paso, todavía siguen sin resolverse.
Y podemos agregar más causas y reclamos efectuados, para normalizar condiciones laborales y convencionales, en general, dentro de las Centrales Nucleares.
Desde nuestro lugar, no pretendemos otra cosa que llevar adelante una política gremial y social, que nos permita ser la organización sindical que los trabajadores puedan elegir libremente para que los represente.
¿Será esto mucho pedir en democracia?
En otros tiempos esa pregunta no hubiera sido fácil de hacer, y mucho menos de responder.
En la década de la dictadura, a comienzos del año 1976 a los dirigentes sindicales que defendían y se ponían al frente de los trabajadores, las políticas de un Estado Nacional represor, los hacían “desaparecer”.
Un dictador de la época llegó a afirmar: “no están ni vivos, ni muertos, están desaparecidos.”
En la actualidad, parecería ser que también se pretende hacer “desaparecer” a algunos.
En el caso de nuestro compañero Secretario Adjunto Damián Straschenco, el primer intento de hacerlo “desaparecer” fue con una ingesta de agua pesada.
Cómo no les alcanzó, el segundo intento para hacerlo “desaparecer”, fue despedirlo.
De hecho lo hicieron “desaparecer” de las Centrales Nucleares y de su puesto de trabajo desde mayo a la fecha.
El relato se parece adecuar más a la década del 70, pero se está llevando adelante hoy en Lima, a 100 km. de la Capital Federal, en el año 2017.
¿Cual será el próximo paso? No lo sabemos.
No sabemos hasta dónde puede llegar la necesidad de anular a los representantes de los trabajadores.
Sólo podemos decir que desde nuestro humilde lugar de delegados y dirigentes sindicales haremos lo humanamente posible para no “desaparecer”.
Y recordarles a todos que el Sindicato de Luz y Fuerza Zárate nació hace casi 30 años para nunca estar “desaparecido”.
Por eso, hoy más que nunca redoblamos los esfuerzos y agradecemos a todos los compañeros que respaldan nuestro proceder con nuevas afiliaciones y apoyo participativo.
De nuestra parte ya hemos empezado las acciones judiciales pertinentes para la reinstalación de nuestro compañero Damián Straschenco a su función laboral y sindical; y en cuanto a la causa penal se harán todas las acciones pertinentes para que desde la Justicia Federal se llegue a la verdad, por medio de una investigación imparcial, seria, responsable e independiente.
Ésta será la única manera de develar todo lo sucedido en el sumario administrativo y en la contaminación sufrida en la persona de nuestro Secretario Adjunto Damián Straschenco.
Finalmente, exhortamos a que todas las autoridades legislativas y ejecutivas locales, provinciales y nacionales a que se expidan públicamente sobre los hechos denunciados.
En ese sentido cabe decir que nuestra entidad sindical realizó denuncia de los hechos ante la OIT y se presentó expediente ante el Concejo Deliberante de Zárate; y que a la fecha estamos esperando que nuestros concejales se expidan ante el cúmulo de hechos denunciados.
Sabemos que se hará justicia.
¡Existimos y seguiremos existiendo!
COMISIÓN DIRECTIVA
Fuente: http://www.luzyfuerzazarate.org.ar/envenenado-y-despedido-nasa-echo-a-straschenco/